En este juego de la vida, donde el materialismo puede mas que las emociones, la realidad indica que el ayer es el problema del hoy, y ni hablar de lo que será el mañana.
Un dicho dice que la planta cuando nace desviada hay que ponerle una varilla como guía para que enderece su rumbo y crezca derecha en su tallo. Un chirlo en la cola bien dado (no brutalmente) cuando el niño empieza a comprender las cosas, hará que el infante empiece a diferenciar lo que está bien de lo que está mal, y comprenderá que existe una autoridad y reglas por cumplir.
El no hacerlo, significará que hay ausencia de límites y es ahí, donde empezará a desafiar el orden poniendo a prueba el rigor de esa autoridad y sentirá que cada accionar vale, al punto de creer que la impunidad con que se mueve es permitida y se esconderá en todo argumento legal para justificar sus actos.
Padres que adoran el materialismo, creen que dándole todo a sus hijos, el ser complacientes les evitará esa resistencia dentro de sus hogares, ignorando que se trasladará a la vía pública. Es así, que al distanciarse buscando esa complicidad familiera, se deja a la deriva esa vida que necesita el apoyo correctamente moral.
No es difícil remontarse mucho tiempo atrás, para recordar lo fácil y barato que resultaba entretenernos y divertirnos. Una muñeca, latas de conservas y sardinas, hojas de árboles, un poco de barro y mucha imaginación, lograba transformar el rincón del patio para que fuera el "juego de la casita" para las niñas y cuando tomaba desprevenido a un varón para intervenir en el juego como papá o un profesional doctor.
En el caso de los varones, un par de medias robadas a mamá, bastaban para armar una pelota (cuando el vecinito no traía la de él, flamante de cuero) y nos creíamos Brindisi, Maradona o Ramón Díaz. Con una caña armábamos barriletes y para rmemorar las series en tv de blanco y negro las películas de Jhonn Wayne para jugar a los cobwoys o policías y ladrones. Era común vernos correr,correr y correr todo el tiempo incansablemente.Tanto en la escuela como en casa, juegos como "la mancha" (de amplia variedad) "la escondida", "el tejo" (o avioncito) "el yoyo", las figuritas...etc. fueron juegos de niños. Mas tarde, casi entrando en la adolescencia, nos juntábamos en casa de algún compañero/a del colegio, para compartir un "asalto" que no era nada mas que bailar, charlar y "picar" algo livianito acompañado de una gaseosa y bajo la mirada disimulada de algún papá.
Hoy, hablamos de progreso, de avance y me pregunto si será así. Encontrándome en la estación terminal de ómnibus, casi amaneciendo, me sorprendió dolorosamente, ver cómo de un remís ( con la música a todo volumen) descendían tres chicas de unos dieciocho a veinticinco años en estado totalmente alcoholizadas. Gritando y riendo a carcajadas, una cayó arrastrándose unos diez metros hasta el baño,mientras las otras celebraban su estado de inmovilidad para ponerse de pie. Me pregunté ¿éste es nuestro futuro? ¿que le espera al mundo? ¿qué le estamos dejando los adultos al permitir este tipo de comportamiento? ¿estarán sus padres tan tranquilos mientras su hija se halla en este estado? Lamentable paisaje y doloroso futuro vi en esas chicas.
Pero también cabe preguntarse qué nivel de responsabilidad tienen los padres para dejar que ocurra esto. Otro ejemplo fue ver ese mismo día, un grupito que no superaría la docena de chicos que corrían desafiando a un patrullero que los vigilaba al que insultaban a viva voz. Arias es sólo un ejemplo, porque en Canals (como en cualquier otro pueblo) es horrible ver menores conduciendo motos y fumando vaya a saber qué cosa, asistiendo a boliches bailables que no ponen freno al límite de edad, y que hacen su negocio a costa de la promiscuidad moral de esta juventud alocada y descontrolada.
Che,vos...que sos el futuro. Te pido que empieces a madurar. Que dejes esa postura de revolucionario barato y empieces a actuar con responsabilidad.Porque ayer fuimos inocentes y tal vez nuestro error fue abusar de los derechos Humanos, creyendo que esos derechos pueden ser violados por Derecho (vaya confusión) . Es necesario imponer el rigor, pero aplicándolo sin compromisos políticos ni acuerdos espurios que favorezcan a los amigos y perjudiquen el orden social. Los límites deben ser respetados porque para eso existe la ley.
Ayer, juegos que nos ayudaban a pensar a construir y utilizar nuestro cuerpo. Hoy, sentados, y hasta acostados, nos dedicamos a destruir nuestro cuerpo,al prójimo y al mundo que nos rodea...(eso sin comentar lo mal que se escribe, desnudando la brutalidad intelectual).
CHE,VOS...REACCIONÁ, PORQUE SOS EL FUTURO,Y TE NECESITAMOS...
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